
Ya estaba todo a punto: el frío con su nieve correspondiente, las luces alumbrando las calles con colores brillantes, la gente de aquí para allá cargadas de bolsas de regalos, los deliciosos dulces típicos en los paladares, el belén y el árbol en las casas... Estas fechas eran las mejores, por mucho que le dijeran que eran unas fiestas tristes. En parte tienen razón, porque cuando alguien falta, estas fiestas no pueden ser lo mismo sin esas personas, pero aún así, cuando eres un niño, estas celebraciones son las favoritas, llenando de ilusión y fantasía los corazones de los más pequeños.
¡También son mis favoritas! :)
ResponderEliminarQuien dice que son unas fiestas tristes??!!! Mentira!:)
ResponderEliminarSi, depende de los años que tengamos observamos la Navidad de diferentes maneras :)
ResponderEliminarTe sigo
Besos